El origen de las áreas verdes se remonta a las Alamedas y la Plazuela Baca Ortiz que fueron establecidas desde los primeros años de vida independiente las plazas y jardines fueron remodelados por motivo de festejo del centenario del nacimiento de Benito Juárez en 1906 y en el Centenario de la Independencia en 1910…
La Plaza de Armas sufrió un cambio definitivo en 1917, al demolerse los edificios que se localizaban al norte de la misma, convirtiéndose desde un principio en el punto de encuentro de la población. A lo largo del Siglo XX se efectuaron diversas intervenciones en este espacio, que culminaron en 1948 con la edificación del actual quiosco.
Está fabricado en cantera rosa, en forma de dodecaedro con los nombres de doce ilustres duranguenses del arte en la parte superior de cada arco, como un homenaje a la trayectoria de cada uno de ellos:
- Silvestre Revueltas
- Fanny Anitúa
- Alberto M Alvarado
- Ricardo Castro
- Luis Baca
- Manuel Herrera
- Velino M Preza
- Alberto Amaya
- Francisco Fournier
- Melquiades Campos
- Belem Anata María
- Arturo Lugo
Fue erigido al centro de la plancha, rodeado por cuatro grandes jardines, a los que se les agregaron diversos tipos de fuentes, desde las de cantera, hasta grandes espejos de agua contemporáneos, siendo que la remodelación total llevó casi dos años de intervención luego de que la cantera del Kiosco fue traída desde la zona de Zacatecas por instrucciones del Arq. Gómez Palacio y fue inaugurado por el Gobernador de ese entonces Enrique Torres Sánchez.
Luego de otras intervenciones menores, en el año 2003 se ejecutó un cambio de fondo en el trazo de la Plaza de Armas, en el que se buscó recuperar parte del trazo de 1917, en el que permaneció el quiosco central, dotándose además de un mobiliario uniforme que hace resaltar la belleza de este espacio urbano.
Aportación: Pedro Núñez López.
Fuente: Libro Durango 1963-2015 “La construcción de una ciudad Moderna” de Javier Guerrero Romero.