En tanto la proporción de la población ocupada que trabaja en la informalidad se elevó de 57.2 por ciento en abril a 57.5 por ciento en el quinto mes del año, precisó el organismo al dar conocer los resultados preliminares de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (Enoe) aplicada en mayo.
Por su parte, la proporción de personas en subocupación, que buscan un empleo adicional al que ya desempeñan por la necesidad de elevar sus ingresos, aumentó de 7 a 8.3 por ciento de abril a mayo de 2016, mientras persisten las precarias condiciones laborales en el país.
A este respecto, el organismo detalló que 59.5 por ciento de la población subocupada está constituida por personas con estudios de nivel medio superior y superior; en tanto que 40.5 por ciento restante correspondió a quienes no concluyeron sus estudios de secundaria.
De acuerdo con las cifras de la Enoe, depuradas de distorsiones ocasionadas por factores estacionales y de calendario, el aumento del desempleo en el país afectó más a los hombres, donde la tasa de desocupación pasó de 3.9 por ciento en abril a 4.1 por ciento en mayo; en tanto que la correspondiente a las mujeres ascendió de 3.9 a 4 por ciento, precisó el organismo.
La tasa de desocupación en las 32 principales zonas urbanas, donde el mercado de trabajo está más organizado, afectó en mayo a 4.9 por ciento de la población económicamente activa de esas ciudades, tasa de desocupación más alta que la de 4.6 por ciento observada en abril.