Un lugar mágico enclavado en la Sierra Madre Occidental, de la Sierra del Nayar en la capital del estado de Durango, se encuentra la impresionante cascada Salto del Agua Llovida, un paraíso que como duranguenses debemos estar orgullosos de ella, pues cuenta con espectaculares paisajes naturales.
Su clima es templado frío, en su vegetación hay ejemplares de árboles de cedro blando, cahuite, pinos, encinos, madroños y tázcates. También se encontrarán musgos y helechos adheridos a los troncos de los árboles y sobre las piedras.
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Su clima es templado-frío. En su vegetación hay ejemplares de árboles de cedro blando, cahuite, pinos, encinos, madroños y los tázcates. También encontrarán musgos y helechos adheridos a los troncos de los árboles y sobre las piedras.
Es una impresionante cascada azul turquesa de casi 100 metros de caída libre, formada por los arroyos Las Playas y El Infiernillo, afluentes de la Cuenca Alta del Río Acaponeta, que descarga sus aguas en la costa del Océano Pacífico en el estado de Nayarit. Al chocar los vientos al suroeste con la caída del agua, forman una brisa que baña a los visitantes, quienes podrán observar un arcoiris, al atravesar los rayos del sol en el agua.
Entre la fauna, se encuentran venados corriendo sobre las montañas y aves de estancia temporal anual como las guacamayas verdes, que se dejan ver iniciada la primavera.
La entrada tiene un costo de 50 pesos por persona. Hay miradores, asadores y cuenta con tirolesa y espacios de recreación. ¡Es toda una aventura para los amantes de la naturaleza!
Para llegar a la cascada, se recorren 144 kilómetros de la ciudad por la carretera Durango-Mazatlán: 60 kilómetros hasta Navíos, luego una desviación a la izquierda para entrar a una zona de carretera y parte de terracería, hasta llegar a la comunidad de San Isidro y de ahí, se recorre una hora más aproximadamente. En total son tres horas desde la ciudad de Durango hasta la cascada Salto del Agua Llovida.