Desde hace años se ha comprobado que los bebés recién nacidos que beben leche materna desarrollan un mejor sistema inmune, que los protege de infecciones y alergias. Lamentablemente no todas las madres pueden amamantar a sus crías, por diversas causas.
Para intentar solucionar ese problema, se han creado los bancos de leche, donde el líquido materno se pasteuriza, congela y almacena. Todo este proceso afecta la calidad de la leche, reduciendo sus nutrientes. Un equipo de farmacobiólogos de la Universidad de Guadalajara busca solucionar el entuerto gracias a un moderno proceso único en el mundo que permitirá conservar la leche materna con mayor calidad.
Los universitarios, gracias al apoyo del Hospital Civil de Guadalajara, lograron “secar” la leche demadres donadoras con un método de aspersión que la vuelve polvo, lo cual facilita su resguardo y mantiene su capacidad nutritiva, perdiendo únicamente el 10 % de su valor nutrimental.
Además puede almacenarse hasta 6 meses sin echarse a perder. Gracias a este metodo de deshidratación las inmunoglobulinas, la lactoferrina y algunas grasas presentes en la leche materna prácticamente no perdieron sus propiedades.
Blanca Rosa Aguilar Uscanga, cabeza del proyecto y jefa del departamento de Farmacobiología del Centro Universitario de Ciencias Exactas e Ingenierías (CUCEI) de la UdeG, promueve la instalación de un gran banco de leche materna en polvo en México, que sería el primero de su tipo en el mundo y permitiría alimentar a miles de niños. De acuerdo con los especialistas, el largo periodo antes de la caducidad del producto permitirá que la leche materna en polvo pueda llegar a comunidades alejadas de las grandes ciudades sin demasiados problemas.
Actualmente el proceso se encuentra en tramite de patente, pero los especialistas creen que será muy útil dentro del sector público.