Como si se trataran de ser los dueños del pulmón más importante de la ciudad de Durango, El Parque Guadiana, los comerciantes que laboran en dicho lugar han utilizado los andadores y los jardines como caminos y estacionamientos para sus propios vehículos.
Por si esto no fuera suficiente ellos se defienden alegando que están en su pleno derecho a circular por esos andadores y que cuentan con “Permisos” y que están “Protegidos” por alguien. Este caso me tocó ver hace tiempo en que una autoridad municipal discutió con un vendedor que trataba de introducir una camioneta tipo Ban cerca del área donde la gente hace ejercicio, aunque pudo lograrlo pues otro grupo de vendedores llegaron a defenderlo.
Bastará dar una vuelta en las tardes y se ven camionetas cerca del área para hacer ejercicio, a gente que se tiene que hacer a un lado del andador de adoquín para que el vehículo pase, siendo que estos corredores están hechos especialmente para que la gente camine por ahí.
En esta situación lo que menos quisiéramos saber es quién otorga los permisos para vender en el interior del parque, sino quién es ese famoso “protector” quien permite que se introduzcan automóviles y que circulen libremente por las pistas para hacer ejercicio y pasillos de dicho lugar.
Sabemos que hay momentos en que nuestro parque Guadiana agoniza y se hace lo posible para poder rehabilitarlo por parte del gobierno estatal, municipal y de los mismos ciudadanos, pero con estos casos hacen que todo ese esfuerzo no valga la pena.
Las fotografías que les presentamos las encontramos en redes sociales y lo peor del caso es que esto ya lo vemos como algo muy común cuando no debería de ser así .
