El Gobierno Municipal de Durango realiza acciones para mejorar la calidad del aire de la ciudad a fin de disminuir daños al ecosistema y para que la salud de los ciudadanos no sea afectada por la contaminación ambiental.
Una de esas acciones sustentables que se están ejecutando, es la construcción de 184 hornos ecológicos, conocidos como MK Durango, en el Parque Industrial Ladrillero (PIL), donde se invierten 20 millones de pesos. Este proyecto se cristaliza gracias a la colaboración de los tres niveles de gobierno, con el respaldo de Semarnat y la SRNyMA para echar a andar este modelo de obradores que promueven una industria más amigable al medio ambiente.
Y es que dichos cocedores, según mediciones oficiales, emiten hasta 70 por ciento menos de partículas contaminantes (PM 10) a la atmósfera en comparación a los quemadores a cielo abierto.
Cabe mencionar que la edificación de los hornos ecológicos es parte de un paquete integral de obra por casi 30 millones de pesos destinado a brindar vida digna a las familias que se dedican a la producción de ladrillo en el parque industrial.
En este proyecto también se incluye la pavimentación del camino principal, así como servicios de agua potable y alcantarillado. Además, pronto se iniciarán los trabajos para construir la colonia La Ladrillera, en cuya primera etapa se proyectan 252 viviendas.
En otras acciones, Karla Alejandra Zamora García, directora de Medio Ambiente Municipal, refirió que se toman medidas para mitigar la emisión de humos y partículas provenientes de la actividad industrial ya que en temporada invernal se presenta el fenómeno del efecto invernadero.
En este tema, Profepa, Semarnat, SRNyMA y Medio Ambiente Municipal han emitido exhortos para 47 empresas para que del primero de diciembre al 29 de febrero atiendan la recomendación, además de que revisaran su equipo con anticipación para mantenimiento preventivo o correctivo. La mayoría de las industrias son de tipo forestal, aunque también se encuentran asfalteras, maquiladoras dedicadas a la fabricación de arneses y otras en el giro de alimentos.
Dentro de la normativa municipal se trabaja en torno al control y la disminución de la contaminación sonora en el sector de comercios y servicios, expuso Zamora García.
Durante el presente año se han realizado 64 dictámenes para establecer los límites máximos de decibeles en base a los lineamientos de la NOM-081-Semarnat- 1994. En este punto, la servidora pública reconoció el interés por parte de los comerciantes para mantenerse dentro de la norma.